Durante la temporada navideña, el dolor y el estrés golpean con fuerza. Como resultado, es importante encontrar cosas que le brinden consuelo o alegría.
Me di cuenta de poco en los últimos dos primaveras: he pasado demasiado tiempo sin poder apreciar o atesorar los pequeños placeres aparentemente sin sentido de la vida. A medida que envejezco, más me aproximación buscando estas cosas, especialmente cuando los seres queridos ya no están físicamente cerca para brindarle la comodidad a la que puede suceder estado acostumbrado.
Entonces, presento una breve letanía de mis cosas favoritas que me llevan a un buen ocasión. Y por merced, comenta con las pequeñas cosas de la vida que disfrutas porque la alegría compartida es doble alegría.